Estudio Fotográfico Ana Zoe

No, nuestras fotografías parten desde los  3 meses en adelante

Nuestras fotografías están diseñadas en función de cada etapa y edad de los niños. En el caso de los bebes de algunos meses de edad, debes fijarte si apoyan bien su cabecita y se pueden sostenerse sentados sin apoyo, si presentan condición pueden optar a nuestras sesiones en el bosque y nuestra serie clásica. En el caso de no poder sostenerse por si solos pueden optar a nuestra serie de fantasía( en un huevito, de bichito o dentro de una tacita)

Aunque la sonrisa de los niños es de las cosas más mágicas y fotogénicas que existen, no debes limitarte a mostrar una sola parte, un sesgo de su carácter. No te limites a buscar la sonrisa, busca también todo aquello que forma parte de ellos, el llanto, la concentración, los ojos desorbitados de emoción. Esas imágenes dicen tanto como su sonrisa, y además la complementan y hacen que consigas un retrato completo de su fascinante personalidad. 

En nuestras sesiones se contempla el tiempo suficiente para que los niños se aclimaten y entren en confianza. En el caso que un niño llore y no quiera fotografiarse, como primer criterio que utilizamos es no forzarlos a una sesión , preferimos re-agendar una nueva sesión, en ese caso no vuelves a cancelar por otra sesión, esa es nuestra garantía para que te puedas llevar una buena fotografía.

Es importante que al momento de reservar tu hora, sea un momento conveniente para tu hijo, sin sueño, sin hambre, que sea una hora que esté tranquilo y descansado.

Planifica tu sesión que sea la primera actividad que tengas con él y que no sea la ultima del día, cuando ya este cansado.

Tráele elementos que le sean propios, un juguete favorito o algún elemento que le llame la atención.

Lleva consigo un jugo o un alimento que uses como premio

No lo obligues a posar o a sonreír la mejor opción es que les dejes desenvolverse a su aire, déjalos jugar y divertirse, las imágenes serán mil veces mejores que si los obligas a posar, a poner caras extrañas o sonrisas forzadas.